From “Arden las pérdidas”
De las violentas humedades, de
los lugares donde se entrecruzan
residuos de tormentas y sollozos,
viene
esta pena arterial, esta memoria
despedezada.
Aún enloquecen
aquellas madres en mis venas.
Fue
la música mortal, el alarido
de los caballos incesantes, fue
una pavena fúnebre a la hora
del algodón ensangrentado.
Fue la declinación de mil cabezas,
la gárgola que aúlla maternal, los círculos
de la gallina atormentada.
Es aún, otra vez, la cal, el hueso
frío en nuestras manos, la
médula negra de la policía.
Bajo la actividad de las hormigas
había párpados y había
agua mortal en las cunetas.
Aún en mi corazón
hay hormigas.
Notes:
“De las violentas humedades, de,” “Fue,” and “Bajo la actividad de las hormigas” by Antonio Gamoneda from Arden las pérdidas, © Antonio Gamoneda, 2003.
Read the translators' note by Katherine M. Hedeen and Víctor Rodríguez Núñez.
Source: Poetry (December 2024)