“Por las noches ella se convertía en animala”

Por las noches ella se convertía en animala
saltaba los techos de las casas
caminaba escondida entre las sombras
sus cuatro patas su carita de muchacha bonita
su cola sus pechos redondos de lado a lado
vestida de bulto negro se paseaba entre la milpa
comía deliciosos animales pequeños
enamoraba a las estrellas con su mirada perdida
la animala llegaba cansada a su casa
nada recordaba al día siguiente
amanecía despeinada y con los pies lastimados
con las uñas negras y el cuerpo caliente
una noche salió a buscar la luz de la luna
bajó a un barranco a encontrar su destino
a aullar con los coyotes sus tristes penas
descubrió que la vida y la muerte tenía sentido
y no regresó nunca más a su cama de muchacha buena.